
Al fin puedo sentir esa paz que faltaba a mi organismo y alma, ahora esa paz esta invadiendo completamente todo mi sistema. Después de un tiempo de lágrimas convertidas en cuchillos afilosos ahora es una carcajada la que las remplazan, siento una ligereza después de un tiempo de estres. Sé que ahora puedo correr lo que quiera, en vez de estar gateando por ese camino peligroso. Que bien se siente esto, la paz y felicidad que volvieron a mi.